viernes, 31 de julio de 2009

El soundtrack de tu vida # 001
















Manuel Sepúlveda.

-->Mi amigo Abel hoy es un hombre ocupado. Ya no es el niño con el que ayudábamos al Cura en las misas, ni tampoco el estudiante de media con el que pasábamos las jornadas dando vueltas o tocando guitarra. Quizás se parece mucho al compañero de radio de los lunes por las tardes del año pasado, pero aún así hay cambios desde esa fecha. Ahora está a las puertas de ser un profesional, y por lo tanto, hay menos tiempo para mantener con vida espacios tan interesantes como éste. Así que aquí estoy, buscando la manera de (apegado a la pauta del creador y editor de este Blog) reflejar el “Soundtrack de mi vida”:

- Un Tema: Resulta difícil elegir una canción cuando durante tu vida has escuchado quizás miles. Pero ¿quién no se ha preguntado el tema que le gustaría escuchar el día de su funeral? (Sí, quizás me puse fatalista y tengo claro que es imposible escuchar dentro del ataúd, pero se entiende la idea ¿cierto?) Bueno, por lo menos yo si me hago esta pregunta y tengo una respuesta clara: ese día debe sonar “La poderosa muerte”, canción del disco “Alturas de Machu Pichu” de “Los Jaivas”. Para mí este tema es alucinante, y las 2 veces que lo escuché en vivo lloré. Es así de simple, hay cosas que no se explican ni deben explicarse. Quizás no es el tema que más me gusta, no sabría decir cuál es ese, pero esta es la canción que vino a mi mente cuando quise escribir este párrafo.


- Un Disco:



Esto es vergonzoso, pero debo hablar aquí del álbum “Estadio Nacional” de “Los Prisioneros” (2002). Se que musicalmente esta banda apesta, se también que Jorge González es un adicto que hace rato dejó de escribir buenas letras para dedicarse a hablar estupideces, pero a pesar de aquello, este disco marcó un giro en mi forma de entender la música. Puedo decir que con este disco empecé a conocer el Rock, quizás entré por una puerta horrible, pero existe un cariño especial por aquel álbum que sonó una y mil veces en mi casa, del cual me sabía todas las canciones de manera ordenada, incluidas las intervenciones de los protagonistas. Puedo decir que tuve el agrado de disfrutar algo muy similar al disco en el concierto de la banda en el estadio regional de Collao, donde lejos “Tren al Sur”, acompañada de la típica llovizna de nuestra región, fue el momento más imponente de la noche.

Hace rato no escuchó este álbum, es más, ya no tengo un solo disco de Los Prisioneros… creo pronto recordaré tiempos antiguos =P


- Una Banda: 



Esto es más sencillo. No hay lugar a dudas. “Foo Fighters” tiene algo que para mí es fundamental: la sencillez. Con unas simples notas y unos cuantos arreglos la banda logra crear canciones excelentes, donde se puede observar algo de Punk, Hard Rock, y como no, Grunge. Un amigo muy cercano a este Blog (=P) dice que lo mejor que hizo en su vida Kurt Cobain fue dispararse, así Dave Grohl pudo dejar la batería y armar este pedazo de banda. No estoy de acuerdo. Quisiera que Cobain viviera y siguiera creando temas (Grohl también lo querría), pero es cierto que agradezco que Dave se atreviera a armar este proyecto, y por sobre todo, admiro la capacidad de desmarcarse de la banda más importante de los 90 y de la última figura en la historia del Rock. Así, en resumidas cuentas, lo único que quiero es ver a Foo en vivo algún día, y estoy seguro que varios amigos aperrarían en el viaje.

 

- Un show:

Se puso difícil de nuevo. Hace unos meses vi a Radiohead, y fue una noche mágica, bella, casi perfecta. Sin embargo este blog tiene algo de punk, y “Pearl Jam” tiene mucho de eso. El 22 de Noviembre del año 2005 fue una noche inolvidable. Reconozco que para ese entonces conocía de la banda lo que la radio me ofrecía, pero sabía era una de esas oportunidades que no se repiten en la vida. Fuimos a Santiago con Pablo y Andrés, y disfrutamos de casi 2 horas llenas energía, emoción, fuerza, etc. El estar a 1 metro de la reja, el cantar bajo la llovizna de “San Carlos de Apoquindo” junto a 25 mil personas que llenaron el estadio (ese estadio no se llena para los partidos de fútbol, xD), el aparecer un segundo en el video del concierto, todo eso hace que este sea el mejor show de mi vida.

Eso es, queda mucho por decir, porque la música es uno de los pilares de mi vida, pero espero esto sirva para mantener con vida la obra de mi buen amigo Abel!


NdelE: Bueno, la idea de esta sección que se estrena, es mostrar la relación que tiene la música con la vida de todos nosotros, es cosa de ponerse a pensar y los resultados van a sorprender a más de alguien. Siempre hay alguna canción que te recuerda un momento, un disco que te recuerda a alguien especial (o quizás no tanto), una banda que te recuerda un lugar, etc. ese es el punto a tocar, y cómo no, esta sección no la haré yo. A lo mejor después de varias ediciones de esto me animaré a hacer la mía, pero por mientras le dejo esto a mis amigos, personas cercanas, que han compartido conmigo parte importante de la vida y que sé que sienten algo parecido a mí por la música.

miércoles, 22 de julio de 2009

The Ataris no viene a Chile


A lo largo del tiempo se transformó en una de mis bandas favoritas. Y es que la sinceridad de las letras, lo pegajoso de las melodías y la actitud perseverante de Kris Roe (mal que mal ÉL es la banda, el resto siempre cambia para cada disco) hace que me guste The Ataris.
Bueno, la cosa es que estos cabros andan dando una vuelta por la Sudamérica y tocan en Panamá, Costa Rica, Colombia, Venezuela, Perú, Brasil, Argentina y... no en Chile.
Qué mala fortuna. Maldigo aquél 16 de Septiembre de 2006 (o 2007?) cuando vinieron, mi dinero no alcanzaba a costear todo el gasto que implicaba viajar a verlos (lo que en realidad no era el real motivo) y la banda estaba en una etapa muy rara... Un disco que más que The Ataris parecía My Bloody Valentine, calificado entre los peores de 2007 y así... Una suma de factores que terminaron por desmotivarme.
Ahora que Kris se recupera de ese estado anímico que lo llevó a hacer un disco tan raro como "Welcome The Night" y promete un disco nuevo que sería un Back-To-The-Basics viene de gira de nuevo y para acá, nada. Lo más probable es que los promotores locales no quieran irse para atrás dada la baja asistencia a shows de similar índole de los últimos meses. Una pena. En fin, da pie para ponerse a escuchar The Saddest Song en versión acústica un par de veces y después pasar las penas con Teenage Riot.

lunes, 20 de julio de 2009

Del Recuerdo # 002: Punk pero Eurodance.

Es que la fiebre de... cómo lo lllaman? Ah, sí, Kitsch! está pegando, y bueno, como decía un amigo mío en el verano mientras andábamos por el sur "te tengo cachao que igual erís Kitsch" Y ahí recién empecé a cuestionármelo. Y no sé si me hará "Kitsch" el hecho de acordarme siempre de programas viejos de TV, las canciones que estuvieron de moda en su momento, y cosas así. En fin, entre todo eso, ha habido una fiebre por lo que estuvo muy en boga en los 90's (y con esto no me refiero al hardcore metalizado vegan ni a Kurt y compañía) y es el Eurodance.

Todo empezó con Corona, la que cantaba el inolvidable "This is the rhythm of the night", siguió con La Bouche, Technotronic hace poco y ahora viene nada menos que Haddaway. Uno más de los exponentes del One Hit Wonder, o en buen chileno, el que tuvo un puro tema que la llevó y era. Ahora falta que vuelva DJ Bobo, que venga 2 Unlimited y termina de quedar la escoba. Viviera en Santiago puro iría a todas.
Mi socio se presenta los días 22, 23 y 24 de Julio en el espacio Broadway y las entradas valen $6000 y $23000 VIP.

Cómo olvidar su hitazo, un clásico. What is love:



Hay mucha música aparte del punk que ha estado en mis orejas durante mi vida y bueno, cuando tenía 6 años era lo que salía en la radio.
Para hacer el contraste del título, junto con esta música también sonaba la Cicciolina de Los Peores de Chile, otro clásico.



Y de yapa me encontré esto, les suena el nombre Los Parkinson?



Eso.

Volví.

Después de la tormenta, viene más tormenta. Mi pequeño refugio que tenía botado volverá a las andanzas con algunas ideas que tengo a mano. De a poco iré construyendo mi castillo en el aire de recuerdos y música de la que me hace sentir, da lo mismo si bien o mal, sentir al fin y al cabo.